La junta directiva de la Cofradía se reúne para cortar las gargantillas que todos los farinatos llevarán hasta el miércoles de Ceniza
Comienza la cuenta atrás para la festividad de San Blas. A partir del próximo 3 de febrero, todo farinato que se precie de serlo llevará en su cuello la gargantilla, para que el santo patrón de la garganta le proteja durante todo el año. Eso sí, no deberá quitársela hasta el miércoles de ceniza, momento en que deberá quemarla. Los miembros de la directiva de la Cofradía de San Blas se encargan de tener todo a punto para la fiesta, por su puesto también las gargantillas. En la tarde de este frío viernes de enero, una semana antes de la onomástica, se han reunido para cumplir la tradición.
Unos le dan vueltas a una madera hasta llegar a las cincuenta, otros cortan, otros atan y colocan. Todo el mundo atareado para cortar las gargantillas.
El presidente de la cofradía José Antonio Paniagua nos cuenta que el día de San Blas saldrán a la venta más de 13.000 gargantillas. En la tarde de este viernes se han cortado casi 9000 ya que había gargantillas todavía del año pasado.
Los mayordomos de este año son los hermanos Blanco Elvira: Jezabel, Julián y Laura. En la víspera de la fiesta, 2 de febrero, será la tradicional hoguera en Sanjuanejo. El día 3, será la procesión a las doce desde Sanjuanejo al Monasterio de la Caridad, bendición de gargantillas por el obispo Mons. José Luis Retana, a continuación misa y tradicional convite.
Así van los preparativos de la fiesta de san Blas en Ciudad Rodrigo. Y tú ¿de qué color llevarás la gargantilla este año?


