La pasión por el Carnaval también llega al único convento de clausura de la localidad
La pasión por el Carnaval también llega al único convento de clausura de Ciudad Rodrigo. Las monjas del Convento de Madres Carmelitas, ubicadas en la plaza de San Cristóbal, han comenzado a elaborar dulces dedicados a la Campana Gorda, con forma de campana, y al Toro del Aguardiente, con forma de toro. La venta tiene lugar de nueve y media a una por la mañana y de cuatro y media a seis por la tarde.