El empresario de Salamanca con el que tenían acordada la paella les dijo a las doce que no vendría a elaborar la comida y tuvieron que adelantar a mediodía lo que estaba previsto para la merienda
Las cinco asociaciones de mayores de El Rebollar suelen reunirse cada verano en una población distinta para celebrar una jornada de convivencia. Hoy, con este motivo, 270 personas de Navasfrías, El Payo, Peñaparda, Robleda y Villasrubias han tenido un encuentro en las piscinas de Peñaparda.
Día magnífico en cuanto al tiempo, temperatura muy agradable, un espacio encantador, traslado en autocar o en coches particulares, música para bailar y un único problema: el empresario con el que tenían acordada la paella, Miguel Ángel Arroces Grano, les dijo a las doce del mediodía (hora de comienzo del encuentro) que no iba a venir a hacer la paella. Todo ello, a pesar de haber estado hablando con él por teléfono ayer y antes de ayer, según comentó la presidenta de la asociación de mayores de Peñaparda, Antonia Pascual.
Todos los presidentes y participantes estaban bastante indignados ante esta situación. Los presidentes de las asociaciones decidieron resolver el tema de la comida, adelantando lo que tenían previsto para la merienda (empanadas y embutido, entre otras cosas) para la hora de la comida. El buen humor y las ganas de estar juntos, sin embargo, estuvieron presentes durante toda la jornada entre los numerosos participantes.
